La inviabilidad futura del actual sistema de pensiones público, contributivo y de reparto en España es una de las cuestiones urgentes a abordar por cualquier gobierno, pero la conveniencia política hace que se posponga una y otra vez.
El experto Diego Valero, presidente de la consultora Novaster, explica para Proa Comunicación las causas del problema, y propone soluciones para que el sistema de pensiones mantenga el nivel de prestaciones actual para las futuras generaciones.
Sistema inviable
¿Por qué no es viable el sistema? Por dos factores. El primero,la mayor longevidad de las personas, que alarga el tiempo efectivo de recepción de las pensiones, y con ello el gasto. El segundo, el elevado porcentaje (80%) que representa la pensión sobre el salario recibido en la vida laboral, lo que desincentiva al ahorrador para buscar alternativas fuera del sistema público.
El resultado es la no sostenibilidad del sistema actual a largo plazo, lo que obligará a reducir el porcentaje de la pensión frente a salario, y/o aumentar la edad mínima para la jubilación. Es decir, el número de años de cotización a la Seguridad Social, si se quiere percibir la pensión de jubilación en su nivel actual.
Por tanto, el primer paso que necesita dar el ahorrador es conocer cuál va a ser la prestación que percibirá en el momento de su jubilación, para poder establecer un plan de ahorro a su medida. Es una información que el estado debería facilitar a los ahorradores, pero que no hace.
Modelo eficiente de pensiones
Existen otros modelos de pensiones mixtos que combinan la prestación desde el sistema público con aportaciones desde la empresa y el ahorro individual, que son mucho más eficientes que el actual.
El modelo más eficaz debería ser aquel en el cual el sistema público determine un nivel mínimo básico para la subsistencia, añadiendo un nivel de prestación en función de las contribuciones realizadas, más la utilización de la economía conductual para fomentar el ahorro entre los individuos.Si se aplica este modelo, el nivel de ahorro futuro será sostenible porque crecerá la bolsa para pensiones.
La comunicación, herramienta clave
La comunicación puede servir para dar a conocer nuevos modelos distintos al vigente, tanto para el ahorrador como para las entidades públicas y privadas involucradas, y mover a la toma de decisiones. La comunicación, en definitiva, debe ser la herramienta que indique a todos el camino a seguir.
La comunicación es por ello, clave, para informar a los ahorradores sobre las distintas opciones de prestación en su etapa de jubilación si no varían su estrategia, y para aclarar qué nivel de pensión se alcanzará en función del nivel de ahorro asumido.
Además, la comunicación puede ser muy útil para estimular la economía conductual, es decir, el análisis de los comportamientos económicos en función de la psicología humana. Si se utiliza como herramienta para este fin, puede convertirse en una palanca imprescindible para interpretar, y corregir, comportamientos. Y lo que es más importante, ayudar en la toma de decisiones.
Concienciar a la sociedad sobre la necesidad imperiosa de buscar alternativas al sistema actual de pensiones debe hacerse de forma simple, sencilla, y atractiva, y en el momento adecuado. El resultado será una toma de decisiones rápida y correcta.
Javier Ferrer
Director Área Comunicación Financiera Proa Comunicación, apasionado del mundo de las inversiones y especialista en comunicar modelos de negocio apoyados en el asesoramiento financiero y la gestión de patrimonios