Nadie hoy en día concibe que en nuestros hogares no haya puertas con cerradura de todo tipo, acorazada y protegida en muchos de los casos por una alarma que puede estar conectada a
una central de alarmas; y si proceden detectores de presencia y mil aparatos más que podría seguir enumerando. La ciberseguridad trata otro tipo de ámbitos como los móviles, las
tabletas, los portátiles, los ordenadores, coches y todo tipo de dispositivos que se conectan a una red (Internet). Con la puesta en marcha a mediados de septiembre de la Directiva Europea de Pagos, más conocida como PSD2, que obliga a tener una “autenticación fuerte” (que supone usar dos de las tres siguientes: algo que la persona sabe, PIN, contraseña, etc. Algo que la persona posee, credencial, tarjeta magnética…etc. Algo que la persona es, reconocimiento facial, retina…etc.) en este tipo de transacciones, nos vemos obligados a revisar como de seguras o no, son las económicas, que hacemos desde nuestros dispositivos.
¿Cómo los podemos proteger? Mas allá de la protección física que evita arañazos o deterioro en el transporte, nadie lleva su móvil o portátil atado. ¿Qué tipo de protección estamos dedicando a estos dispositivos? Como siempre la protección lógica es una opción a considerar con contraseñas no evidentes, cambiándolas de vez en cuando, parece simple, pero exige disciplina. Si usamos el móvil como si fuera un ordenador y se guardan datos sensibles nos tenemos que plantear si necesitamos incrementar los niveles de seguridad usando programas de pago para protegerlos, antivirus o con medidas biométricas, que tienen sus limitaciones, incluso aplicando todos a la vez.
Hay hechos en ciberseguridad que pueden pasar desapercibidos, como por ejemplo tener en un mismo ordenador, con el que nos conectamos a la red, los datos privados y ficheros, de los que no
sabemos si son seguros, esto puede infectarnos de virus y hacer incluso que perdamos la información que tenemos guardada, ¿tiene sentido utilizar dos ordenadores, uno con los datos sensibles y otro para las conexiones, “hobbies” y ocio? En el mundo hiperconectado en el que vivimos ¿cómo podemos estar seguros de que nadie se haya conectado al ordenador de nuestro coche, haya accedido y comprometido la información?
Son temas sobre los que la ciberseguridad está ya ofreciendo soluciones, como en otros tiempos fueron soluciones frente al robo, el abuso y la invasión en el terreno propio, los cerrojos y las
ventanas con rejas. El tema es diverso, apasionante y complejo, pero mientras tanto no vendría mal utilizar el sentido común y usar algunas reglas básicas que ayuden a salvaguardar la privacidad de la información que poseemos como es ser prudentes con los intercambios de ficheros que se hacen, no conectarse a ningún lugar que no sea suficientemente confiable, cambiar las contraseñas más a menudo y en definitiva ser razonablemente desconfiados y si es posible informarnos previamente con algún experto en ciberseguridad.
Manuel García Ramírez
Director en MGR Consultores IT y Seguridad